viernes, 9 de diciembre de 2011

Reglas y Juicios Internos

Es curiosa la frecuencia con la que nos movemos basándonos en sistemas de creencias cargados de reglas internas sobre cómo el mundo, los demás o nosotros "deberíamos"  comportarnos. Piense en cuánta energía derrocha empeñándose en que las cosas cambien o se adapten a cómo cree que deberían funcionar. Quizás le parezca mal o injusto que los demás no se esfuercen tanto como usted y pueda llegar, por ello, a disgustarse, enfadarse o a no esforzarse tanto, aunque tal cosa no coincida con sus valores. También es posible que, creyendo que un vehículo está adelantándole incorrectamente, se empeñe en obstaculizarle, para mostrarle su desaprobación, la maniobra, con el correspondiente riesgo de provocar un accidente.

Y así mismo son muchas las personas que parecen creer que su pareja debe conocer, sin necesidad de que los expresen, sus sentimientos y deseos llegando, con el tiempo, a disgustarse si creen que no se les tiene en cuenta.

Pero son muchas, las cosas que se encuentran más allá de nuestro control, sobre todo en relación a la conducta de los demás o los acontecimientos del mundo. Por eso, el empeño en cambiar esas cosas puede acabar consumiendo energía que podríamos destinar a otros menesteres, con la correspondiente decepción, ansiedad y hasta angustia.
Observe, en este sentido, la emergencia de juicios y reglas internas y deténgase a considerar, cuando la palabra "debería" aparezca en su mente o salga de su boca, si se trata de una regla o de un juicio. Quizás se sorprenda entonces al descubrir la gran influencia que, en usted, tienen las reglas internas y los "debería". Pero no debe tomarse esto como motivo de recriminación o crítica sino, al contrario, como primer paso para establecer conscientemente un nuevo tipo de relación consigo mismo y con el mundo.

Mindful Tip: Aquí, será conveniente que utilice
las grillas para la auto-observación que le ha sido entregada en su entrenamiento formal en Mindfulness. Luego de practicar algún ejercicio básico como "Espacio de respiración" o "Integración propioceptiva", trabaje de la misma manera que usted lo hizo cuando tuvo que observar sus pensamientos, y complete las reacciones y sensaciones que le generó trabajar psicológicamente con "Los debería". Finalmente, evalúe qué consecuencias podría a usted acarrearle, no cumplir dichas normas y reglas internas. Evalúe su verdadero peligro y anímese a intentar -al menos como experimento espiritual- a romper una o varias de esas reglas internas. Siempre con consciencia plena del momento presente y sin forzar, aceptando lo que venga a su mente evitando juicios y reproches. Siéntase libre de tomar nuevas decisiones en su vida. Verá el efecto positivo y rejuvenecedor de dicha actitud.


Cómo puedo cambiar mi forma habitual de entender las cosas?

Nuestras percepciones erróneas determinan, lamentablemente, nuestras limitaciones. Y la conciencia puede, en ese sentido, ayudarnos a romper los límites establecidos por nuestro condicionamiento natural. La práctica del Mindfulness puede despertarnos del letargo del inconsciente y ayudarnos a salir del callejón sin salida de nuestras pautas de funcionamiento habitual.

Veamos ahora, si esto le resulta demasiado abstracto, un ejemplo que quizás pueda ayudarle:
Un piloto se hallaba en una misión de combate cuando se dio cuenta de que el fuego enemigo acababa de perforarle el depósito de fluido hidráulico de su avión, una avería muy grave porque difícilmente podría, dadas esas condiciones, activar el tren de aterrizaje. Entonces, casi se vuelve loco, pero acabó dándose cuenta de que su única esperanza consistía en conservar la calma. Entonces fue cuando se le ocurrió pedir a la tripulación que tapasen como mejor pudieran los orificios de bala y orinasen en el depósito, una idea muy poco convencional que acabó, nos obstante, salvando su vida y la de toda la tripulación.

Anímese a pensar, todos los días al menos una vez al día, de una manera que nunca se le hubiese ocurrido pensar.


No hay comentarios:

Publicar un comentario